Una gimnasta menor de edad convierte el escándalo de las fotos de famosos en un caso de abuso de menores

El escándalo de las fotos de famosas ha dado un giro escandaloso después de que los abogados de la gimnasta olímpica McKayla Maroney exigieran la retirada de las fotos de su clienta de 18 años desnuda de varios sitios web de pornografía, alegando que era menor de edad en el momento en que se tomaron.
Maroney, que en un principio negó su identidad en las fotos, fue una de las víctimas más jóvenes a las que se dirigió el incidente de piratería informática. Su equipo legal pretende presentar cargos por abuso de menores contra cualquiera que haya publicado o compartido fotos explícitas de la adolescente.
Además, cualquiera que sea sorprendido descargando o viendo imágenes sexuales de un menor puede ser declarado culpable de abuso de menores según la legislación de Estados Unidos y el Reino Unido.
Los piratas informáticos podrían enfrentarse ahora a cargos por distribuir pornografía infantil, además de cargos federales que incluyen el robo de identidad y el acceso a un ordenador protegido sin la debida autorización.
Al parecer, Porn.com recibió una carta del abogado de Maroney en la que se exponían las circunstancias, y retiraron las imágenes inmediatamente.
Aproximadamente 400 fotos personales se filtraron en varias plataformas de medios de comunicación de más de 100 celebridades. Se especula que los presuntos agresores están asociados a una banda de distribución de contenidos muy extendida.
Se ha confirmado que el FBI está implicado y ha estado trabajando atentamente en el caso.
"El FBI está al corriente de las acusaciones relativas a intrusiones informáticas y a la difusión ilegal de material que implica a personas de alto perfil y se está ocupando del asunto", declaró el lunes una portavoz del FBI.