Un argentino de 43 años se enfrentará a un tribunal de Sydney acusado de poseer material de abuso de menores.
Los agentes de la Policía Federal Australiana y de la Fuerza Fronteriza Australiana afirman que se incautaron de 18 dispositivos de almacenamiento que contenían material de abuso infantil del hombre que llegó en un vuelo procedente de Filipinas el sábado.
Comparecerá el miércoles ante el Tribunal Local Central de Sídney acusado de importar productos de nivel 2 sin autorización y, si es declarado culpable, se enfrenta a una pena de hasta 10 años de cárcel.
El sargento en funciones de la AFP Ryan Henderson dijo que la detención ponía de manifiesto que la explotación y el abuso de los niños seguían siendo un problema mundial.
"La AFP tiene como objetivo proteger a los niños, vivan donde vivan, y garantizar que cualquiera que intente hacerles daño -o explotar los abusos cometidos contra los niños- sea identificado y llevado ante los tribunales", dijo.
El superintendente de la ABF, Phillip Anderson, elogió los continuos esfuerzos del personal de fronteras para detener la entrada de material de abuso infantil en el país.
"La lucha contra la explotación infantil es una prioridad operativa para la ABF y nuestros agentes están muy capacitados para identificar en nuestros aeropuertos a las personas que están implicadas en este tipo de material abominable o que lo transportan", afirmó.
