Maxwell Schollenberger murió solo en su habitación en el condado de Lebanon, muerto de hambre. Tenía 12 años. Grace Packer fue violada, estrangulada y desmembrada en el condado de Montgomery por el novio de su madre adoptiva. Murió en 2016 a los 14 años. En el condado de York, cinco niños fueron sacados de una "casa de los horrores". Su padre no se opuso a los cargos de abusaso.
La mayoría de los niños que mueren o casi mueren en Pensilvania por abuso y negligencia no son tan mayores.
La mayoría de ellos tiene menos de 5 años, y muchas de sus familias eran conocidas por las agencias de bienestar infantil antes de morir. No es de extrañar que las comunidades estén indignadas cuando esto sucede. ¿Qué tipo de monstruo comete estos actos? ¿Cómo evitamos que esto le suceda a otro niño? ¿Y cómo no vio esto el sistema de bienestar infantil?
Desde la muerte de Max, he escuchado a muchas personas desesperadas por encontrar el punto final, el lugar donde los niños estén seguros. Sin embargo, no está claro cómo llegamos allí. Cuando se presta tanta atención a los casos trágicos, el público presiona para que haya más asistentes sociales y más investigaciones por parte de las agencias de bienestar infantil. Los legisladores también se esfuerzan por reformar las leyes. A raíz del caso de abuso sexual de Jerry Sandusky, Pensilvania implementó cambios significativos.
Simplemente no está claro que todo eso ayude a los niños cuyas vidas están en peligro. Se contratan más investigadores de bienestar infantil, pero los niños siguen muriendo. Se requiere que más personas denuncien los signos de abuso y negligencia, pero ¿eso ayuda o solo aumenta un sistema de bienestar infantil sobrecargado?
Más niños son retirados de sus hogares para ser colocados en hogares de acogida, y esa es su propia tragedia, ya que la separación de familias es devastadora para los jóvenes. Pensilvania gastó $ 1.9 mil millones en bienestar infantil en el año fiscal 2018-19; $ 294 millones de eso fueron para investigar el abuso y negligencia infantil. Mientras tanto, la mayoría de los casos investigados en las agencias de bienestar infantil involucran negligencia, a menudo familias pobres que tienen problemas para pagar el alquiler o comprar alimentos. Algunos defensores de los niños argumentan que esas familias pobres necesitan dinero para mantener las cosas juntas, fondos que ahora van a las familias de acogida para alimentar a esos mismos niños y ponerlos en una guardería.
Grace Packer era una niña adoptiva, adoptada por una pareja que tenía varios otros niños adoptivos. El padre abusó sexualmente de ella. Cuando fue a la cárcel, la madre adoptiva de Grace y el novio de la madre planearon su muerte. Esa no es la norma en el cuidado de crianza, de ninguna manera, pero es una señal de alerta. El cuidado de crianza debe ser un último recurso, no una solución fácil. Se debe tomar tiempo y cuidado para encontrar los mejores padres de crianza. Cuantos más niños pasamos a hogares de acogida, es menos probable que hayamos examinado cuidadosamente a los padres de acogida para aquellos que más los necesitan.
El Kansas City Star encuestó a casi 6.000 presos en 12 estados, y el 25% de los que respondieron a la encuesta habían estado en el sistema de cuidado de crianza. Cuando mueren niños en Pensilvania, el estado requiere que se escriba un informe para revisar lo que sucedió, qué pistas se pudieron haber pasado por alto y cómo sucedió esta terrible tragedia. Esos informes se hacen públicos en línea, pero están muy mal redactados.
Es la única ventana que tienen los residentes del estado hacia el sistema de bienestar infantil, y es preocupante; todo lo demás está cerrado al público. Con un sistema que gasta tanto dinero y lleva la carga de mantener a los niños más seguros, parece que se necesita más información disponible para la revisión pública, y las salas de los tribunales deben estar abiertas, siempre que se pueda proteger la identidad de los niños.
¿Eso salvará a más niños? No lo sabremos hasta que cambie. Nunca entenderemos lo que sucede en una sala de tribunal para quitar a los niños de sus familias si los jueces, abogados, defensores y familias son los únicos autorizados en la sala.
¿Cómo perdimos a Max Schollenberger? Desapareció en un dormitorio y muy pocas personas sabían que estaba allí. Su madre biológica, que no lo había visto durante años, no tenía dinero para luchar por la custodia. Ese es un problema común: ser padres siendo pobres. Si alguien pudo haber salvado a Max, podría haber sido ella. ¿Cómo nos aseguramos de que ambos padres permanezcan en la vida de un niño, a menos que el niño corra algún riesgo con uno de ellos?
A pesar de todo lo que hemos hecho para cambiar las leyes, ¿por qué no es esta la condición más básica y humana para el niño?
