Un hombre y una mujer, padres de una niña de 7 años, fueron arrestados por abusar, golpear y obligar a su pequeña hija a vivir en el armario de su casa.
La policía respondió después de que alguien reportara el incidente con serias denuncias sobre cómo la niña era tratada por sus padres.
El hombre fue identificado como Jack B., de 32 años, y la mujer fue identificada como Tiffany C., de 33 años. Ambos fueron arrestados a principios de este mes y acusados de crueldad en segundo grado con un menor, pero fueron liberados pocos días después con una fianza de $ 25.000 cada uno.
Según la policía, recibieron una llamada al 911 cuando alguien denunció de forma anónima el incidente con serias denuncias sobre cómo se trataba a una niña de 7 años en su casa.
Cuando los agentes llegaron a la casa en Luisiana, encontraron a la niña viviendo en condiciones precarias y con heridas importantes debido a las condiciones de vida. Era más que obvio que los padres la habían abusado y golpeado y realmente no se preocupaban por ella. La niña fue llevada al hospital infantil para ser examinada y recibir tratamiento médico. No se dio ninguna noticia sobre su estado de salud desde que ingresó en el hospital.
“Esta es una situación en la que se mantuvo a una niña en un armario cerrado con llave. Eso es lo que tenían para ella. Y en una habitación con almohadillas para cachorros en el piso para las heces y todo eso”, dijo el fiscal de distrito C. Ballay. El Departamento de Servicios para Niños y Familias tomó a la niña bajo su custodia.
“El Departamento de Servicios para Niños y Familias no puede comentar, ni siquiera reconocer la existencia de una posible investigación de abuso o negligencia que involucre a un niño. Si hay una investigación, las leyes estatales hacen que todo el proceso, desde el informe hasta la investigación y el resultado, sea confidencial”, dijo una portavoz de la agencia en un comunicado. “Lo principal es que sabemos que esta niña está protegido ahora, así que no es como si la niña regresara con cualquiera de ellos ahora y, desde mi punto de vista, espero que nunca”, dijo Ballay.
Ballay agregó que está feliz de que alguien haya llamado la atención de las autoridades sobre este caso. En la mayoría de estos casos, un buen pariente o un vecino curioso pueden llamar al 911 e informar a la policía. Además, se puede llamar primero a los servicios familiares y seguramente pedirán ayuda a la policía cuando visiten los hogares para verificar si hay niños víctimas potenciales.
Ballay alienta a todos los que tengan información sobre casos similares como este a informar a las autoridades, ya que se toman muy en serio todos los casos de este tipo. Deseamos a la niña en este caso una pronta recuperación.
