FORT EDWARD - Un hombre de Whitehall fue condenado el viernes en el Tribunal del Condado de Washington a 2 años de prisión por abusar sexualmente de una niña.
Kenneth Reed, de 37 años, se había declarado culpable el 9 de mayo de un delito grave de intento de abuso sexual en primer grado como parte de un acuerdo con la fiscalía.
Reed había sido condenado originalmente en junio de 2021 a 15 años de prisión. Fue declarado culpable después de un juicio de una semana en mayo de 2021 por cargos de delito grave de abuso sexual agravado en segundo grado y abuso sexual en primer grado, así como un cargo de delito menor de poner en peligro el bienestar de un niño.
Reed fue detenido en agosto de 2020 después de que las autoridades dijeran que había tocado las partes íntimas de la niña, menor de 9 años. Los resultados de laboratorio determinaron que el semen encontrado en la ropa interior de la niña contenía ADN que coincidía con el perfil de Reed o de un pariente masculino. Las autoridades también declararon que creen que el corte en las partes íntimas de la víctima no pudo producirse como consecuencia de un accidente o una caída.
Sin embargo, su abogado, Jeffrey Lichtman, impugnó la condena por una cuestión técnica. Argumentó que el tribunal no determinó correctamente si la víctima, que testificó en el juicio, tenía la inteligencia y la capacidad para comprender lo que significa prestar juramento de decir la verdad.
Aunque los fiscales argumentaron que se permite a la niña prestar testimonio sin juramento, los magistrados de la División de Apelación, Tercer Departamento, estuvieron de acuerdo con Lichtman en que la cuestión de si tenía la inteligencia necesaria para comprender el procedimiento debería haberse tratado en el tribunal. Revocaron la decisión por ese tecnicismo y devolvieron el asunto al Tribunal del Condado de Washington para que se celebrara un nuevo juicio, que estaba a punto de comenzar cuando se alcanzó el acuerdo de culpabilidad.
El fiscal Tony Jordan dijo que Reed renunció a su derecho a apelar. Tendrá que cumplir 10 años de supervisión posterior a la puesta en libertad y también hay una orden de protección que le prohíbe tener contacto con la víctima hasta 2043.
