Una nueva presentación judicial alega que los ejecutivos de JPMorgan Chase estaban al tanto de las acusaciones de abuso sexual y tráfico de personas contra su entonces cliente Jeffrey Epstein, varios años antes de que la institución financiera cortara sus lazos.
Nueva York CNN - Una nueva denuncia judicial alega que los ejecutivos de JPMorgan Chase estaban al tanto de las acusaciones de abuso sexual y tráfico de personas contra su entonces cliente Jeffrey Epstein, varios años antes de que la institución financiera cortara sus lazos.
La última denuncia, parte de una demanda contra el banco presentada por el fiscal general de las Islas Vírgenes de EE.UU. (USVI), añade un cargo adicional alegando que JPMorgan obstruyó la aplicación de la ley federal y los organismos de persecución de Epstein.
"La relación de JP Morgan con Epstein al permitir que su empresa de tráfico sexual tuviera acceso a grandes sumas de dinero en efectivo cada año fue mucho más allá de una relación bancaria normal (y legal)", dice la demanda, añadiendo que los ejecutivos del banco también eran conscientes de las retiradas de efectivo potencialmente sospechosas.
Epstein, de 66 años, fue cliente de la entidad financiera hasta 2013. Fue hallado muerto en una prisión de Nueva York en agosto de 2019.
Epstein estaba a la espera de juicio por cargos federales que le acusaban de operar una red de tráfico sexual entre 2002 y 2005 en su mansión de Manhattan y en su finca de Palm Beach, en la que pagaba a niñas de hasta 14 años por sexo.
La nueva denuncia contra JP Morgan, presentada el miércoles, se produce días después de que su consejero delegado, Jamie Dimon, se sentara con Poppy Harlow, de CNN, en una entrevista exclusiva.
Dimon dijo a Harlow que "la retrospectiva es un regalo fabuloso", cuando se le preguntó si el banco debería haber actuado antes después de que Epstein se declarara culpable de solicitar prostitución con una menor en Florida en 2008.
Un portavoz de JP Morgan declinó hacer comentarios a la CNN sobre la nueva denuncia presentada, que formaba parte de la demanda interpuesta en diciembre.
Los abogados de JP Morgan han negado las acusaciones. Acusaron al gobierno de las Islas Vírgenes Estadounidenses de buscar "bolsillos más profundos", según los documentos judiciales.
La demanda enmendada detalla intercambios de correos electrónicos internos y documentos, alegando varios ejemplos que refutan la sugerencia de Dimon de que la institución financiera necesitaba "retrospectiva" con respecto a Epstein.
Según la demanda, la ejecutiva de JPMorgan Mary Erdoes "admitió en su declaración que JPMorgan era consciente en 2006 de que Epstein había sido acusado de pagar en efectivo para que llevaran a su casa a chicas menores de edad y mujeres jóvenes".
"Mary Erdoes testificó que JP Morgan dio de baja a Epstein como cliente en 2013 después de que ella se diera cuenta de que los retiros eran 'dinero en efectivo real'", alegó la presentación. La declaración de Erdoes se tomó el mes pasado.
Además, la presentación afirma que el Equipo de Respuesta Rápida de JPMorgan observó en 2006 que Epstein realizaba "rutinariamente" retiradas de efectivo por importes de entre 40.000 y 80.000 dólares varias veces al mes, por un total de más de 750.000 dólares al año. Los funcionarios concluyeron ese año que "su cuenta 'debería clasificarse como de alto riesgo' y requerir una aprobación especial."
Los correos electrónicos internos citados en la presentación muestran que los empleados de JP Morgan, incluidos los altos ejecutivos, discutieron la cobertura de las acusaciones de Epstein durante años después de 2006 hasta que fue dado de baja como cliente siete años más tarde. Funcionarios de alto nivel del banco también se reunieron sobre la cuenta de Epstein y las acusaciones en su contra ya en 2008, según la presentación judicial.
En 2010, la división de gestión de riesgos de la empresa señaló la condición oficial de delincuente sexual de Epstein. Eso fue dos años después de que se declarara culpable de solicitud de prostitución con un menor en 2008 y pasara unos 13 meses en prisión.
"Vea a continuación las nuevas acusaciones de una investigación relacionada con el tráfico de niños - ¿todavía se siente cómodo con este cliente que ahora es un delincuente sexual registrado?", según un correo electrónico en las nuevas partes no redactadas de la presentación judicial.
Ghislaine Maxwell, una antigua confidente de Epstein que también era cliente de JP Morgan, fue señalada en 2011 por el director de cumplimiento antiblanqueo del banco cuando supuestamente trató de abrir una cuenta para un "negocio de consultoría de reclutamiento personal."
"¿Qué quiere decir ella con reclutamiento personal? ¿Está segura de que esto no tendrá nada que ver con Jeffrey? Si quiere seguir adelante, sugiero que lo marquemos como cliente de alto riesgo", escribió el director en un correo electrónico interno.
También ese año, un alto funcionario de cumplimiento que revisaba la información de JP Morgan sobre Epstein le llamó "sugar daddy", señalando su patrocinio de cuentas bancarias privadas y tarjetas de crédito para dos jóvenes de 18 años "que parecen formar parte de su séquito íntimo", dice la demanda.
El mes pasado, un juez federal de distrito que preside el caso en Manhattan dictaminó que la demanda contra JPMorgan podía seguir adelante, denegando parcialmente la moción del banco de desestimar la demanda.
