LISBOA, 11 nov (Reuters) - La Iglesia Católica Romana de Portugal dijo el jueves que crearía una comisión independiente para investigar los abusos sexuales a menores presuntamente cometidos por miembros del clero, tras la presión ejercida por destacados feligreses para que se levante el velo de silencio en torno al asunto.
La Conferencia Episcopal de Portugal dijo en un comunicado que decidió crear la comisión para mejorar la forma en que se manejan los casos y para "llevar a cabo un estudio para aclarar la historia de este grave asunto."
El anuncio se produce después de que un importante informe de una comisión independiente en Francia revelara el mes pasado que alrededor de 3.000 sacerdotes y funcionarios religiosos abusaron sexualmente de más de 200.000 niños en los últimos 70 años.
Fue el último golpe para la Iglesia Católica Romana, que se ha visto sacudida por escándalos de abusos sexuales en todo el mundo, a menudo relacionados con niños, en los últimos 20 años.
En Portugal, más de 200 católicos enviaron una carta a la Conferencia Episcopal a principios de este mes en la que instaban a poner en marcha una investigación similar a la de Francia, argumentando que los abusos sexuales a menores eran un problema "sistémico" "directamente relacionado con el ejercicio del poder" dentro de la Iglesia.
Los firmantes de la carta afirmaron que en la última década se han denunciado en el país "algo más de 10 casos" de abusos sexuales a menores por parte de miembros del clero, pero advirtieron de que es probable que el número sea significativamente mayor.
En la actualidad, los obispos de cada una de las 21 diócesis portuguesas son responsables de investigar las presuntas infracciones cometidas por miembros del clero, pero no existe un organismo de supervisión general.
En junio, el Papa Francisco hizo la revisión más amplia de la legislación de la Iglesia Católica en cuatro décadas, insistiendo en que los obispos tomen medidas contra los clérigos que abusen de menores y adultos vulnerables.
Los miembros de la comisión aún no han sido nombrados, dijo el obispo de la ciudad de Setúbal, José Ornelas, en una conferencia de prensa el lunes, añadiendo que la comisión y los miembros del órgano de investigación tendrían "independencia para crear sus propios procesos y metodología."
"No tenemos miedo, sino todo lo contrario", dijo.
La carta a los obispos, entre cuyos firmantes se encuentran legisladores, escritores y otras figuras públicas, decía que la comisión debería incluir a creyentes y no creyentes, así como a expertos en ciencias sociales y justicia.
Todavía no está claro el periodo de tiempo que abarcarán las investigaciones de la comisión, pero los firmantes de la carta sugieren que debería abarcar cinco décadas.
