Un gran jurado de Jefferson Parish acusó el jueves a una mujer de Kenner de asesinato en segundo grado por la muerte de su hijo pequeño.
Alexis Callero, de 34 años, está acusada de causar la muerte por sobredosis de fentanilo de Leo Callero, de 20 meses.
El gran jurado también acusó a Callero de obstrucción a la justicia, según los registros judiciales. En otro caso, se la acusa de sacar de su casa el cadáver de un hombre que más tarde sería declarado muerto por sobredosis de fentanilo, según la policía de Kenner.
Madre problemática
Los socorristas fueron llamados a la residencia de Callero en el bloque 3800 de East Louisiana State Drive en la mañana de Año Nuevo después de recibir un informe de un niño que no respondía, dijeron las autoridades.
Leo fue declarado muerto poco después de la llegada del personal médico. Una autopsia y pruebas toxicológicas determinaron que el niño murió de toxicidad aguda por fentanilo, según la Oficina del Forense de Jefferson Parish.
"No había evidencia de trauma, (y) no se pudo encontrar ninguna otra causa de muerte, aparte de los narcóticos en su sistema", dijo el detective de la policía de Kenner Nick Engler durante su testimonio en una audiencia el 19 de abril en el caso.
Los investigadores registraron la habitación de Callero y encontraron un recipiente de hojalata similar al que se utiliza para cocinar e ingerir heroína, según Engler. El algodón encontrado en la lata dio positivo en fentanilo. Los residuos encontrados en una bolsa azul en su habitación dieron positivo en cocaína, dijo.
Callero dijo a la policía que Leo había dormido en su cama la noche anterior. Salió brevemente de la residencia hacia las 5 de la mañana, pero volvió a la cama poco después, según Engler. Cuando Callero se despertó sobre las 11 de la mañana del 31 de diciembre, dijo a los investigadores que encontró a Leo inconsciente.
Durante la investigación, los detectives se enteraron de que Callero dejó a Leo con miembros de su familia el día antes de su muerte para comprar e ingerir heroína, según Engler.
La abuela paterna y la tía de Leo acusaron a Callero de ser una madre problemática que luchaba contra la drogadicción y que ya había perdido la custodia de sus otros hijos. El Departamento de Servicios para la Infancia y la Familia de Luisiana confirmó que la agencia había asumido previamente la custodia de un número no revelado de los hijos de Callero.
"Alexis no merecía en absoluto tener a Leo", dijo la tía del niño, Lexis Staub, quien señaló que el pequeño había nacido con metadona en su organismo.
Otra muerte
En el caso de obstrucción, la policía de Kenner fue llamada a la casa de Callero el 30 de julio de 2022 y encontró a Christopher Weathersby, de 37 años, tendido en su jardín delantero, dijeron las autoridades. No respiraba y más tarde fue declarado muerto de una sobredosis de drogas.
Cuando los agentes hablaron con Callero, ella les dijo que no sabía por qué Weathersby estaba en su patio delantero o cómo había llegado allí, dijo la policía de Kenner.
Luego admitió que había estado en su casa, pero dijo a los investigadores que se había ido. Callero afirmó que más tarde salió y encontró el cuerpo de Weathersby.
Pero mientras los detectives investigaban la muerte del niño, interrogaron a los familiares y determinaron que fue Callero quien arrastró el cuerpo de Weathersby fuera de la residencia, dijo la policía de Kenner.
Las autoridades no estaban seguras de si Weathersby estaba muerto antes de que su cuerpo fuera trasladado o cuánto tiempo había estado fuera antes de que Callero llamara a la policía.
Después de la acusación, el tribunal aumentó la fianza de Callero a 600.000 dólares, según los registros. Ella estaba detenida el jueves en el Centro Correccional de Jefferson Parish en Gretna.
