Los funcionarios de Tower Hamlets utilizaban la palabra "novio" cuando se referían a los autores de los abusos a menores, según un informe publicado recientemente sobre la lucha contra la explotación sexual infantil por parte de las bandas criminales.
Los desgarradores testimonios de 30 jóvenes testigos de todo el país -incluida Tower Hamlets- han contribuido a la elaboración del informe de la Independent Inquiry into Child Sexual Abuse (IICSA).
El informe -publicado el martes 1 de febrero- constata "amplios fallos" en la forma de abordar este tipo de explotación en todo el país. Concluye que las víctimas infantiles -algunas de las cuales denunciaron haber sido violadas, abusadas y, en un caso, obligadas a realizar actos sexuales con 23 hombres mientras estaban retenidas a punta de pistola- fueron a menudo culpadas por las autoridades del calvario que sufrieron.
Algunos incluso fueron abofeteados con antecedentes penales por delitos estrechamente relacionados con su explotación sexual, reveló el informe, que se centró en los eventos entre 2016 y 2019. Una niña de Tower Hamlets -conocida solo como CS-A22- fue acogida tras ser evaluada como de alto riesgo de explotación sexual infantil en 2017 a la edad de 13 años. Fue puesta bajo protección policial cuando se detectó que había sido abusada sexualmente y violada.
Sin embargo, en otros lugares se la describió como "una persona que desaparece con frecuencia [que] parece exponerse voluntariamente al peligro". También se utilizó un lenguaje similar para referirse a otra niña de Tower Hamlets, CS-A77, a la que se describió como "una persona que asume riesgos". Además, el informe descubrió "un uso inapropiado de la palabra 'novio' en referencia a los agresores adultos de CS-A77".
Otra revelación fue que los agentes de la Met en Tower Hamlets habían estado utilizando avisos de advertencia de secuestro de menores (CAWN) contra las jóvenes víctimas para impedir que se relacionaran entre sí. Sin embargo, el informe determinó que la perspectiva de recibir una condena penal podría disuadir a los jóvenes de revelar la explotación sexual infantil, y en realidad podría aumentar el control que los perpetradores tenían sobre ellos. El profesor Alexis Jay, que presidió la investigación, dijo: "La explotación sexual de los niños por parte de las redes no es un fenómeno raro confinado a un pequeño número de áreas con casos criminales de alto perfil. "Encontramos numerosos fallos por parte de las autoridades locales y de las fuerzas policiales en la forma de abordar estos abusos sexuales.
"Parecía haber una suposición errónea de que la explotación sexual infantil estaba disminuyendo, sin embargo se ha convertido en un problema aún más oculto y cada vez más subestimado". El informe concluye que los fallos observados en todo el país podrían deberse a la determinación de las autoridades locales de asegurarse de no ser vistas como "otra Rochdale o Rotherham" -ciudades asoladas por las revelaciones sobre la explotación sexual infantil- en lugar de un deseo de "erradicar... y exponer su magnitud".
Un portavoz del Ayuntamiento de Tower Hamlets dijo que acogía con satisfacción el informe, sobre todo porque ha puesto de manifiesto áreas de mejora que se ajustan al "deseo del ayuntamiento de lograr los mejores resultados para los niños". Agregaron: "Nos complace que el informe reconozca que 'el municipio ha emprendido un trabajo sustancial para abordar el hallazgo de Ofsted de 2017 de que su departamento de atención social infantil era inadecuado'."
El organismo regulador entregó al consejo una calificación de Bueno en 2019 para reflejar las "mejoras significativas" realizadas en ese período de dos años. Ese informe hizo referencia a un "enfoque implacable para mejorar la práctica", "personal capacitado y comprometido" y "fuertes asociaciones para proteger a los niños del daño". La comandante de la policía metropolitana Sue Williams, que testificó ante la IICSA, añadió: "Hemos solicitado ser uno de los principales participantes en la investigación, ya que nos hemos comprometido a mejorar nuestros esfuerzos para evitar que los niños sean víctimas y a llevar a cabo investigaciones exhaustivas sobre los responsables".
"Aunque estamos de acuerdo en que hay que mejorar, la respuesta que damos hoy ha evolucionado y seguiremos aprendiendo para garantizar que las víctimas y los supervivientes sigan siendo el centro de nuestro enfoque". El año pasado, la Met puso en marcha un Protocolo de Explotación Infantil en todo Londres para que todos los organismos puedan identificar a los niños vulnerables a la explotación, y pretende evitar que se pierdan oportunidades de protegerlos.
